Biomecánica de la pisada
Estudio de la pisada durante la marcha
Desde corredores, senderistas, hasta para caminar por la calle, es conveniente estudiar cómo se comporta tu pie, y por ello tu cuerpo, al caminar, en qué ejes y planos realizas la pisada, observar si falta algún tipo de movimiento y observar cómo distribuyes las cargas de peso durante la marcha.
Todo ello nos puede dar mucha información por ejemplo, porqué te duele la espalda, porqué sobre cargas un muslo más que otro, porqué te duele la base del pie, cómo evitar una fascitis plantar, y muchas más cosas de las que puedas imaginar.
¿Para qué sirve un
estudio de la pisada?
ATLETAS
Disminuye el riesgo de sufrir lesiones además de mejorar el rendimiento deportivo. Se puede modificar la técnica en caso de que de que ésta provoque lesiones recurrentes.
SENDERISTAS
Para compensar alteraciones en la marcha o patologías ya que están sometidos a marchas por terrenos más estrictos e irregulares.
VIDA COTIDIANA
Ayuda a una mejora ergonómica de nuestro cuerpo y prevenir lesiones provocadas por el trabajo que realizamos o por momentos de ocio.
¿Tienes, o has tenido alguna de estas patologías?
Fascitis Plantar
Caminar por las mañanas y cuando estás mucho tiempo parado, al reanudar es un dolor insufrible, tengo una solución efectiva para tu fascitis plantar.
Espolón Calcáneo
Cuando caminas descalzo sientes como si te clavases una piedra en tu talón, tengo una alternativa para que no tengas que operarte.
Dedos en garra
¿Conoces las plantillas con almendra para disminuir la garra de los dedos?
FASCISITIS PLANTAR
La fascitis plantar se produce por una inflamación aguda de la aponeurosis plantar (estructura de tejido conjuntivo que se encuentra en la planta del pie y que ayuda a sostener el arco del pie junto con otras estructuras)
Los síntomas más característicos son: dolor en el talón (inserción proximal de la fascia plantar, sobre el tubérculo medial del calcáneo). Es más pronunciado en los primeros apoyos, por la mañana o después de períodos de reposo o sedestación. Disminuye con la actividad y puede aumentar después de mucho tiempo caminando.
Hay muchos factores que lo producen como:
- Tipos de pisada (plano/cavo) y pronación excesiva
- Sobrepeso
- Dismetrías de los miembros inferiores
- Limitación musculatura de la cadena posterior
- Flexión dorsal del tobillo limitada
- Calzado inadecuado (suela demasiado rígida o demasiado blanda, desgaste excesivo del talón)
- Microtraumatismos
- Correr por superficies duras
- Actividades laborales prolongadas en bipedestación
La fascitis plantar afecta aproximadamente al 10% de los corredores durante la carrera y en proporción similar a la población general alguna vez en la vida. Se presenta principalmente en personas de mediana edad y afecta por igual a los hombres y a las mujeres. En ocasiones, impide realizar nuestra vida diaria incapacitando la deambulación.
ESPOLÓN CALCÁNEO
Es una prominencia ósea integrada en la inserción de la fascia plantar. Se produce por una tensión mantenida de la fascia contra el calcáneo, que prolongada en el tiempo da lugar al espolón calcáneo. Es una consecuencia de la fascitis plantar, no una causa. Se halla realizando una radiografía donde se observa una exostosis en la inserción de la fascia.
El 95% de las personas diagnosticadas con espolón no tienen dolor. Simplemente es un hallazgo radiológico tras tener un dolor en el talón. Proviene de otras patologías como la fascitis plantar, enfermedades reumáticas, síndrome del túnel tarsiano…
Los factores más frecuentes son:
- Pie cavo o pie plano
- Sobrepeso
- Calzado inadecuado
- Correr sobre superficies o terrenos muy duros
Su tratamiento es muy similar al de la fascitis plantar.
DEDOS EN GARRA
Son deformidades de los dedos de los pies que generan dolor y limitación en el uso del calzado. Se diferencian según la articulación afectada en:
Dedo en garra: flexión articulación interfalángica proximal y distal.
Dedo en martillo: es la flexión de la articulación interfalángica proximal e hiperextensión de la interfalángica distal.
Dedo en mazo: extensión de articulación interfalángica proximal y flexión de la distal.
Hay diferentes factores que afectan a la formación de estas deformidades como son:
- Factores genéticos o congénitos
- Tipo de calzado: zapatos de puntera estrecha o con mucho tacón.
- Pies cavos, pies planos o valgos
- Enfermedades reumáticas: artritis reumatoide y psoriásica
- Juanetes
Los síntomas principales son:
- La desviación de la articulación que se va desarrollando lentamente a lo largo del tiempo
- Callos y durezas que aparecen en el dorso o en el pulpejo del dedo
- Inflamación
- Dolor por el roce del calzado
- Dolor por el apoyo constante del metatarsiano, lo que se conoce como Metatarsalgia.
¿Cómo saber si necesito plantillas?
Evaluar de forma objetiva
Es importante evaluar de forma objetiva nuestros pies tanto articulaciones como musculatura o cualquier proceso doloroso que estemos sufriendo en ese momento. Para ello es necesario acudir al podólogo para que te haga un estudio exhaustivo de la extremidad inferior si sientes dolor constante en la planta del pie, cansancio en las piernas, molestias en caderas o rodillas, inestabilidad en tu pisada… Todo ello puede da lugar a compensaciones que tu cuerpo esta realizando por diversas causas que tu desconoces y que está provocando estas dolencias.
Observa cómo caminas
Ponte frente a un espejo y fíjate si metes los pies hacia dentro al andar, o si tus rodillas tienen forma de “x” o si observas que tienes un hombro mas alto que otro.
Observa la suela de tu calzado
Dependiendo de porque lado o zona gastas la suela de tu calzado sabremos si estamos caminando bien o si tenemos una pisada patológica. Esto solo se podrá observar bien en un calzado que uses a diario.
¿Sientes dolor en las rodillas, tobillos o caderas?
Una inapropiada forma de caminar con el paso del tiempo puede dar origen a la aparición de dolor en las articulaciones sobre las que más influye tu pie al caminar.
Cualquier tipo de lesión tarda como mucho 6 meses en desaparecer por sí misma, si llevas ya más de 6 meses con dolor, te han dicho que es crónico y no has encontrado solución a tu problema, unas plantillas pueden ayudarte y mucho, aunque no lo creas, porque ayudará a compensar tu pisada y a distribuir la carga de forma que disipe esa dolencia; y por tanto ayudará a cambiar la posición de tu cuerpo.
¿Cómo saber qué tipo de calzado es apropiado?
El tipo de calzado va a ser determinante para cuidar tus pies y por supuesto tu pisada, de aquí en adelante puede suponer un antes y un después para todo tu cuerpo, desde la forma de caminar, molestias en las caderas, en tu columna vertebral, rodillas, tobillos y por supuesto en tus propios pies.
Te enumero una lista de opciones a tener en cuenta a la hora de elegir tu calzado según la ocasión.
Características que debe cumplir un calzado apropiado:
- Debe tener un drop no mayor a 1,2 cm
- La suele debe tener una amortiguación que sea absorbente pero no excesiva.
- La zona del medio pie, debe permitir una torsión controlada y ni excesivamente rígida ni demasiado flexible.
- No debe oprimir el espacio de los dedos, debe tener un espacio amplio que permita que los dedos tenga movilidad y no sean comprimidos.
- Un sistema de sujeción de cordones es ideal para que el pie no baile dentro del calzado.
Qué no debe tener un calzado para que no te haga daño:
- No debe acabar en punta, para no comprimir los dedos entre sí y permita su movilidad.
- No debe ser de suela excesivamente rígida, ni blanda en exceso tampoco.
- El drop no debe ser exgerado, por eso no se recomienda calzado de tacón, y menos de un tacón excesivamente elevado.
- No debe estar suelto el pie en su interior.
PREGUNTAS FRECUENTES SOBRE LOS ESTUDIOS DE BIOMECÁNICA DE LA PISADA
¿Qué médico estudia la pisada del pie?
El podólogo, ya que es el especialista sanitario cualificado para realizar las actividades dirigidas a la prevención, al diagnóstico y tratamiento de las afecciones y deformidades de los pies.
¿Qué te hacen en un estudio de pisada?
El estudio de la pisada consiste en realizar una exploración exhaustiva del paciente donde el podólogo examina cómo se comportan las estructuras musculares y articulares e identifica la causa de alguna alteración que pueda haber.
Antes de nada, se realiza una entrevista con el paciente para recabar todos los datos necesarios que vamos a incluir en la historia clínica.
Posteriormente, se realiza una exploración en camilla teniendo en cuenta todas las articulaciones y musculatura de la extremidad inferior que posteriormente nos dará información del estado del paciente.
Luego pasamos a realizar exploración en bipedestación, donde a través de una plataforma de presiones digitalizada observaremos la huella plantar en estática y los porcentajes de presión.
Y, por último, se hace la exploración en dinámica, donde vemos al paciente caminar durante unos minutos para observar su pisada durante la marcha y como se comporta cadera y rodilla durante el movimiento.
Una vez realizado todo el estudio y según los datos obtenidos, el podólogo redactará un informe con las correcciones o el tratamiento que sea necesario en cada caso.
¿Cómo puedo saber si tengo una mala pisada?
Sabrás que tienes una mala pisada cuando notes dolor en rodillas, cadera, tobillo o pies; cuando sientas tus piernas sobrecargadas, tengas dolor de espalda al andar o al correr, cuando notes que la suela de tu zapato se gasta en pocos meses por un sitio antes que, por otro, si metes los pies hacia dentro o te tropiezas con mucha frecuencia, cuando te veas inicio de juanete, dolor lumbar, etc.
Todo ello son signos de que algo no va bien y es importante tenerlo en cuenta desde que se es un niño hasta la edad adulta. Por ello, es importante acudir al podólogo en cuanto notes alguna de estas dolencias para poder tratarla cuanto antes o prevenirlas en caso de edad temprana.
¿Cuánto dura un estudio de la pisada?
El estudio de la pisada suele durar unos 45 minutos aproximadamente.
¿Cómo debe ser una buena pisada?
Para tener una buena pisada es importante centrarnos en cada parte de nuestro cuerpo y no solo en el pie. No es difícil pero sí que requiere algo de práctica. Tenemos que tener en cuenta lo siguiente:
* Mantenerse erguido al caminar, colocando la barbilla paralela al suelo y por encima de los hombros, mirada al frente y columna vertebral alargada.
* Llevar los hombros hacia atrás y activar la zona del abdomen.
Realizar una pisada donde el talón entre tocando el suelo y luego ir echando el peso hacia delante, hasta la punta del pie y despegar con el dedo gordo del pie.
¿Qué pasa si piso mal al caminar?
Una mala pisada va a conllevar que aparezcan molestias o lesiones en cadera, rodillas o tobillos. Dolor e inflamación de la planta del pie, dolor lumbar, desequilibrios musculares, entre otras cosas.
¿Cómo es la pisada de un supinador?
La pisada de un supinador presenta un mayor apoyo en el borde externo del pie desde el talón a la cabeza del 5 metatarsiano y suele andar con las piernas mas separadas. Este tipo de pisada presenta mucha inestabilidad y sufre grandes impactos contra el suelo.
¿Qué pasa si tengo pisada pronadora?
Antes de nada, saber que una pisada pronadora es aquella que pisa con la parte interna del pie hasta el dedo gordo dificultando al tobillo y al pie para realizar la estabilización del resto del cuerpo.
Esto va a conllevar: dolor en el arco interno de la planta del pie, dolor de cadera, sobre todo en musculatura aductora, dolor de rodilla por la zona externa, disfunción de tibial posterior, dolor de los músculos peroneos y otras descompensaciones biomecánicas.
¿Qué puede provocar una mala pisada?
Una mala pisada afecta de forma general a todo nuestro cuerpo, provocando numerosas lesiones como son: Trocanterítis, síndrome del piramidal, meniscopatías, condromalacia rotuliana, síndrome de la pata de ganso, dolor lumbar, esguinces, periostitis, fascitis plantar, dolor en la zona de los metatarsianos al apoyar, dedos en garra o juanetes.
¿Cómo afecta la pisada a la rodilla?
Dependiendo del tipo de pisada que tengamos va a afectar de una manera u otra a la rodilla. Hay que tener en cuenta que la rodilla por si sola es una articulación inestable, que solo realiza movimiento de flexo-extensión, pero está rodeada por una serie de estructuras (ligamentos, capsula articular, meniscos, musculaturas tendinosas) que hacen que sea más estable. Si algunas de estas estructuras sufren algún movimiento brusco por una mala pisada puede provocar lo siguiente:
– Inflamación de la articulación.
– Tendinitis.
– Desgaste o rotura de meniscos.
– Lesiones de ligamentos cruzados.